No sólo posible, yo diría necesario. Claro, no es algo que uno decida, disponga o automáticamente ya obtenga, y tristemente se te da más grande, yo diría pasando los 30s. ¿Por qué? Porque es simple, distingues la línea entre sexo por placer y sexo por amor, entre “me encanta platicar contigo” y “me encantas tú”.
Los amigos del sexo opuesto siempre tienen una opción “¿Me lo doy o no me lo doy?”. Obvio tiene que existir cierto atractivo si son heterosexuales, te tiene que atraer, pasar mucho tiempo con alguien, es vil y vulgar química corporal, mismos intereses, algo similar a novios sin sexo.
Obvio los que son homo con hetero, son Best Friends Forever gracias a que no hay atracción sexual. Pero no se preocupen, si se dan a su amiga o amigo en un arranque cavernícola y se interrumpe el cuatismo, pueden salvar la amistad, denle una buena dosis de ausencia y ya. El sexo por placer es justo eso, impulso animal, no de cuates.
Entre hombre y mujer hay simplemente caminos que no puedes tomar, no puedes ser amigo de tu ex amante o exnovio o exesposo a menos de que haya hijos, propiedades o trabajo que le hayan quitado importancia al conflicto entre los dos. Fuera de
eso, realmente tienes problemas mentales si crees que puede funcionar. Es falacia pura, llana y sencilla. Una gran adicción de la raza humana es mentirse a sí mismo y el cuento de “volverá” es el que más nos late al parecer.
Claro un camino aun más fantasioso que las princesas de Disney y las novelas del 2 es pensar que puedes ser mejor amigo o amiga de tu crush (dícese de crush: aquel amor imposible que sabes que JAMÁS te va a hacer caso ni te tomará en serio). Claro, hay desviados que aprecian el masoquismo y pueden llevarse años así. Sólo cuiden que no les lleve años en darse cuenta, yo lo viví y jamás funcionó en 8 años, nos queremos mucho ahora y fue hasta que murió dicho crush que pudimos ser realmente amigos.
En realidad hombre y mujer pueden ser amigos, tal vez no de tiempo completo, porque la necesidad de amor e ilusión es muy poderosa, y es muy común confundir cariño con amor. Ojo con hablar las cosas en el momento que se ven cardiacas, no sea que ambos salgan con raspón o peor aún, deslindarse y decir “yo te lo advertí, caíste solito”.
Algo es cierto e irrefutable, en este mundo lo que faltan son amigos incondicionales, que te digan la verdad mortal y directa, que no tengan envidia de ti y tu felicidad, que simplemente disfruten de tu compañía, que te quieran lo suficiente como para dar la vida por ti. Si tienes ese tipo de amigo sea hombre, mujer, palmera o quimera, es íncreible, y creéme que lo vas a valorar más vestido que desvestido cuando necesites alguien que realmente te entienda.